Comentario a Tiempo
Teodoro Rentería Arróyave
LA SANTÍSIMA TRINIDAD, DOLORES HIDALGO, GUANAJUATO. El pasado 16 de abril del presente año, emprendió el viaje al éter eterno, Rosario Ibarra de Piedra, ’la musa de los derechos humanos’, como un periodista anónimo la calificó; vivió 95 años para comprobar que su lucha principal para extirpar del país las desapariciones forzadas es una asignatura pendiente de los gobiernos de todas las nomenclaturas.
Desde nuestro muy personal punto de vista, consideramos que el más horrendo de los crímenes es la desaparición forzada, incluyendo el homicidio y demás delitos, porque no sólo es la agresión a las víctimas, sino la destrucción de las familias. Nada es comparable con la incertidumbre que provoca el no saber cuál fue el destino de un ser querido.
Esa vida tormentosa de activista social, Doña Rosario la inició en 1974, como consecuencia de la desaparición forzada de su hijo Jesús Piedra Ibarra, quien fue acusado de ser presunto integrante del grupo guerrillero ’Liga 23 de septiembre’. El joven de 19 años fue detenido ilegalmente en Monterrey por agentes policiales que posteriormente lo entregaron a instancias militares.
No obstante, esas evidencias, nunca se conoció el destino de su hijo. Esa fue la causa legítima de Rosario Ibarra de su lucha como activista: la búsqueda de su hijo Jesús, por la verdad y la justicia, a la que se unieron decenas de madres que también buscaban a sus hijos o hermanos desaparecidos.
Tres años después, en 1977, fundó el Comité Pro-Defensa de Presos, Perseguidos, Desaparecidos y Exiliados Políticos, que sería conocido como el ’Comité ¡Eureka!’, para exigir justicia y demandar el alto a la impunidad.
Cabe recordar que, el colectivo lo conforman las madres de desaparecidos durante los sexenios de Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría, muchas ellas igual que Doña Rosario, abandonaron este mundo sin conocer el paradero de sus vástagos. Desde luego que la lucha no ha sido vana en todos los casos, Gracias al Comité ¡Eureka! ha sido posible encontrar a más de 148 personas desaparecidas con vida.
’¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!’, es la frase estandarte de esa lucha, que ha hecho suya el Colectivo de Padres de los Estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal de Ayotzinapa.
Por esa lucha que encabezó hasta su muerte fue candidata al Premio Nobel de la Paz en los años 1986, 1987, 1989 y 2006, y fue la primera mujer candidata a la Presidencia de la República.
En 2012, abrió el Museo Casa de la Memoria Indómita para reivindicar a personas víctimas de desaparición forzada, y desaparecidos por motivos políticos. Ibarra de Piedra fue promotora de las reformas constitucionales y legales a favor de los derechos humanos y en contra de la tortura y desaparición forzada.
Cuando recibió del Senado de la República ’la Medalla Belisario Domínguez’, la entregó al presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien le dijo: ’regrésemela cuando haya justicia para los desaparecidos de la guerra sucia de los 70’
Julio Hernández ’Astillero’, relato en su columna de ’La Jornada’: Durante el sepelio en Monterrey de doña Rosario Ibarra de Piedra, una de sus hijas, Claudia, hizo críticas al desempeño de la administración obradorista en cuanto a la resolución de casos de desaparecidos y señaló que en los más de tres años que lleva este gobierno no se ha concedido cita a las integrantes del Comité ¡Eureka!, fundado y dirigido durante largo tiempo por la gran y congruente luchadora social fallecida a los 95 años
A todo lo anterior es de necesidad agregar que la jefa de la misión del Comité de Desaparición Forzada de la Organización de Naciones Unidas, ONU, Carmen Rosa Villa denunció en su más reciente informe que ’la delincuencia organizada "se ha convertido en un perpetrador central de desapariciones en México, con diversos grados de participación, aquiescencia u omisiones de servidores públicos’.
Por consiguiente, señaló: ’los Estados son responsables de las desapariciones forzadas cometidas por los servidores públicos, pero también pueden ser responsables de las desapariciones cometidas por organizaciones criminales’. En este contexto, agregó, ’en términos generales ante la impunidad, la crisis forense en México llega a 52 mil cadáveres sin identificar.
El gremio periodístico, un día sí y otro también, ha denunciado y exigido justicia ante las 28 desapariciones forzadas que ha sufrido y que están pendientes de aclaración, como lo hemos dicho, por la vergonzosa y vergonzante impunidad prevaleciente.
Periodista y escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana, Doctor Honoris Causa por la Universidad Internacional y Académico de Número de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.org, y www.clubprimeraplana.org, y el portal irradia noticias.com